En una transmisión conducida por los comediante Tracee Ellis Ross y Leslie Jordan, se anunciaron esta mañana las 23 categorías de la 94ª edición de los premios Oscar, que este año se entregan recién el domingo 27 de marzo. Todavía falta mucho para saber cómo será la ceremonia, después de un año de entregas de premios virtuales y varias ediciones sin anfitriones. Pero, como siempre, las nominaciones a los premios de la Academia son un evento en sí mismo, que despierta sentimientos encontrados y siempre deja afuera algún nombre que consideramos fundamental.

Las dos películas que encabezan la lista de nominaciones son The Power of the Dog de Jane Campion con 11 nominaciones en 10 categorías y Dune de Denis Villeneuve con 10 en total. La primera ubica a Netflix como el “estudio” con más distinciones en esta edición de los Oscar, con 27 nominaciones en total y grandes posibilidades de llevarse la estatuilla a mejor película. Sin embargo, no fue una excepción para el servicio de streaming, que el año pasado tuvo 36 nominaciones en total para sus producciones y viene perdiendo en las categorías principales desde hace varios años.

En cuanto a Dune, una de las más grandes sorpresas fue la ausencia de Villeneuve en la categoría de mejor dirección, a pesar de que su película está nominada, además de la categoría principal, en las de mejor guion adaptado, diseño de producción, diseño de vestuario y de maquillaje/peinado, mejor edición, cinematografía, efectos visuales, sonido y banda sonora para su compositor Hans Zimmer. Es la tercera película en la historia que logra tantas nominaciones sin que se reconozca a su director, algo que ya había pasado antes con The Color Purple (1985) de Steven Spielberg, para darle contexto a tan extraordinaria situación.

Los demás nominados en la categoría de Mejor Dirección son Kenneth Branagh por Belfast, Steven Spierlberg por West Side Story, Paul Thomas Anderson por Licorice Pizza, Ryusuke Hamaguchi por Drive My Car y Jane Campion por The Power of the Dog. Así, Campion se convierte en la primera mujer en la historia en ser nominada más de una vez en esta categoría, luego de haber conseguido la misma distinción por The Piano (1993). De hecho, un dato que habla de un cambio de paradigmas en la Academia y en la industria, es que desde el año 2000 hasta hoy hubo más nominadas en esta categorías que en los 73 años anteriores.

Por su lado, la japonesa Drive My Car se convierte en una de las pocas películas nominadas tanto en la categoría principal como en la de mejor film en lengua extranjera, además de mejor dirección y guion adaptado. Y pasa a engrosar la lista de directores asiáticos nominados en los últimos años, luego de la arrasadora victoria de Bong Joon-ho por Parasite en 2020 y Chloé Zhao por Nomadland en 2021. Un antecedente que le da grandes posibilidades a la cinta de Ryusuke Hamaguchi, que comparte la categoría internacional con La Mano de Dios (Italia), Lunana: A Yak in the Classroom (Bután), The Worst Person in the World (Noruega) y Flee (Dinamarca).

A su vez, Flee de Jonas Poher Rasmussen también está nominada como mejor documental y mejor película animada, haciendo historia como la primera película en conseguir distinciones en estas tres categorías. La producción de los estudios VICE compite con gigantes de la talla de Disney, Pixar y Sony en la terna de animación, contra Encanto, Raya and the Last Dragon, Luca y The Mitchells vs. The Machines. A pesar de la gran predominancia de Disney en esta categoría, la gran favorita del público es la película de Sony producida por la dupla creativa de Phil Lord y Chris Miller (The LEGO Movie, Spider-Man: Into the Spider-Verse), mientras que la favorita de la Academia para llevarse al menos una de las tres categorías está bastante clara.

En el apartado de actuación hubo varias sorpresas, especialmente en las categorías femeninas. Por un lado, Lady Gaga -una de las favoritas en todas las predicciones- se quedó sin nominación por su protagónico en House of Gucci (que solo obtuvo un reconocimiento en Maquillaje y Peinado). Mientras que Kristen Stewart, que tuvo un recorrido bastante irregular por la temporada de premios, finalmente obtuvo su nominación como Mejor Actriz por Spencer de Pablo Larraín (la única distinción para esta película). Tanto Olivia Colman como Jessie Buckley fueron nominadas como mejor actriz y de reparto, respectivamente, por sus papeles en The Lost Daughter, la ópera prima de Maggie Gyllenhaal. Mientras que Kirsten Dunst también consiguió un merecido reconocimiento por su rol secundario en The Power of the Dog y Penélope Cruz fue distinguida por su protagónico en Madres Paralelas, de Pedro Almodóvar.

En las categorías masculinas, las sorpresas llegaron con distinciones para Jessee Plemmons por The Power of the Dog y Javier Bardem por Being the Ricardos de Aaron Sorkin, quienes curiosamente son pareja de las nominadas Kirsten Dunst y Penélope Cruz en la vida real. Ciaran Hinds fue nominado por su papel en Belfast, mientras que Caitriona Balfe fue ignorada, a pesar de ser una de las favoritas. Andrew Garfield obtuvo el esperado reconocimiento por su protagónico en Tick, Tick… Boom! y Troy Kotsur fue distinguido en la categoría de reparto por su rol en CODA de Sian Heder, convirtiéndose en el primer actor sordo nominado en la historia de los Oscar. La Academia también reconoció a Benedict Cumberbatch y Kodi Smit McPhee por sus magnéticas interpretaciones en The Power of the Dog, conviertiéndose en los favoritos para ganar como mejor actor principal y de reparto.

La categoría de mejor película fue una de las más controversiales, ya que se metieron algunas películas con pocas chances como Don’t Look Up, CODA o King Richard. Por otro lado, hubo gratas sorpresas como la inclusión de Nightmare Alley, la nueva película de Guillermo del Toro que fracasó en taquilla, y la aplaudida Licorice Pizza de Paul Thomas Anderson, aunque sus protagonistas (debutantes ambos) fuero ignorados en las categorías de actuación. Otra de las grandes ausentes fue Jodie Comer por su protagónico en The Last Duel de Ridley Scott y el aclamado Adam Driver, quien protagonizó tres películas de alto perfil el año pasado, pero fue ignorado por la Academia. Mientras que otras como The French Dispatch de Wes Anderson y Last Night in Soho de Edgar Wright fueron por completo ignoradas en todas las categorías.