Llenando el Prode

Camino al Oscar 2022: Los cortos animados y documentales nominados

Analizamos dos de las categorías más impredecibles en la carrera a los Oscars y reseñamos brevemente cada una de las nominadas y sus chances de ganar.

por | Feb 25, 2022

Camino al Oscar 2022: Los cortos animados y documentales nominados, summer of soul

Como gran parte de los premios de esta temporada, los Oscar de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood se enfrentan al reto de renovarse y, además, ofrecer un espectáculo que abarque el año cinematográfico. Ambas cosas, en medio de la discusión inevitable sobre la capacidad de las categorías para ser inclusivas y representativas. Se trata de un recorrido por completo nuevo, a través de la idea del cine como parte de la noción de la cultura pop en transformación. Mucho más, luego de la amenaza que la Industria viene sufriendo hace dos años, debido al parón obligatorio ocasionado por la pandemia.

De modo que los Oscar 2022 tienen la responsabilidad tácita de abrir nuevos espacios de discusión sobre el cine en la actualidad. También sus alcances y sus prerrogativas. Pero más allá de eso, es un recorrido a través de un cambio constante y elemental en la forma en que lo cinematográfico se entiende en la actualidad. Cada categoría es una versión sobre diferentes posturas y concepciones sobre el séptimo arte, que sostiene un lenguaje por completo nuevo y poderoso. Una mirada concienzuda sobre las transformaciones del discurso visual contemporáneo.

Dos de las categorías más abiertas a discusión suelen ser las de cortometrajes y documentales. La primera, por demostrar talento en ascenso, nuevas técnicas y un recorrido novedoso por el Hollywood más experimental. La segunda, por profundizar en temas poco comunes y casi siempre, de manera asombrosa e ingeniosa. Tanto uno como el otro, representan las especulaciones sobre la realidad más consistentes de los premios Oscar y, en especial, su relación con nuevos medios y reflexiones sobre la realidad. Te dejamos una pequeña mirada a ambas categorías y, sobre todo, los proyectos que quizás hagan historia en la noche de la ceremonia. 

Documentales 

Ascension, de Jessica Kingdon

Esta desconcertante visión sobre la sociedad china del nuevo milenio es mucho más que una crítica o una reflexión moralizante. Es una mirada colosal sobre el llamado “sueño chino” y la transformación del país es una maquinaria de producción. Incluso, a costa de sus ciudadanos, naturaleza y costumbres. 

Ascension es también una colección asombrosa de miradas instantáneas sobre China como potencia industrial y la construcción de un nuevo tipo de control gubernamental, basado en la capacidad para la prosperidad como único objetivo. Ajena al discurso político, Kingdon logra atravesar varios estratos a la vez sobre la cultura del país y también, su concepción como una fuerza mecanizada — y fría — sobre el músculo colectivo y el futuro. 

Attica, de Stanley Nelson y Traci A. Curry

La combinación entre los horrores del sistema carcelario, el racismo y la violencia puede ser explosiva. Y el documental Attica logra mostrarlos en toda su amplitud, al analizar con detalle lo que se considera el motín más sangriento de la historia estadounidense. Pero más que eso, la demostración fehaciente de que la justicia norteamericana todavía atraviesa todo tipo de dolores y heridas culturales que necesita enmendar. 

Attica es un recorrido incómodo y por momento desgarrador sobre la tragedia que significó para el sistema penitenciario norteamericano, el secuestro por cinco días de una de sus cárceles emblemáticas. Sin embargo, lo más sorprendente del documental no es su puntilloso sentido de lo histórico y cuidadosa reconstrucción. En realidad, es la vigencia absoluta de sus denuncias, a pesar de las décadas transcurridas. 

Flee, de Jonas Poher Rasmussen

Esta curiosa combinación de animación e historia real, no solo tiene la capacidad de conmover, sino también de profundizar sobre el hecho de la exclusión, el dolor de la emigración y la soledad del emigrante, con un tono preciso que termina por sorprender. Se trata, por supuesto, de una historia de supervivencia. Pero también, una de fraternidad, amor, una mirada de esperanza. Todo bajo una sofisticada concepción sobre la inclusión y el vínculo con un tipo de humanidad delicada y profundamente significativa.

Flee es sin duda un prodigio en el discurso visual y por algo hizo historia al convertirse en la primera película nominada en las categorías de documental, mejor película animada y de habla extranjera. No obstante, su mayor fortaleza radica en lo intangible: en la narración y la mirada sobre los lazos que nos unen, más allá de lo que podría separarnos.

Summer of Soul (…or, when the revolution could not be televised), de Questlove

La música es un puente entre diferencias. También, un discurso modular y profundo sobre el transcurrir del tiempo y la forma en que podemos comprender nuestro paso por el mundo. El documental que narra todo lo ocurrido en The Harlem Culture Festival en 1969 es, además de una confirmación de ambas máximas, un estudio formal sobre la cultura afroamericana en todo su esplendor. 

Entre ambas cosas, el documental brilla por su inteligencia e ingenio, para mostrar los grandes cambios ocurridos en una década extraordinaria que transformó para siempre a Norteamérica. 

Writing With Fire, de Rintu Thomas y Sushmit Ghosh

El periodismo es el rostro del mundo, o eso aseguró el editor y periodista Joseph Pulitzer. La frase parece sostener por completo la premisa de este extraordinario documental, que narra la historia del periódico indio Khabar Lahariya. La publicación, toda una rareza en el país, está dirigido por mujeres dalit y ha sido el fruto de un largo y esforzado trabajo por enfrentar la misoginia, la violencia y la censura. El resultado es una experiencia colectiva que asombra al país y que demuestra que el prejuicio puede ser vencido a fuerza de tenacidad y voluntad creativa. 

Del periodismo impreso al digital: el documental observa con cuidado el crecimiento del periódico. También, de sus periodistas y la noción sobre la comunidad. Toda una celebración al poder intelectual como forma de trascendencia. 

Cortos animados 

The Windshield Wiper, de Alberto Mielgo

La pregunta ¿qué es el amor? ha obsesionado a la humanidad por buena parte de su historia. Y cuando no lo ha hecho, se ha convertido en motivo de guerras y también, de grandes aspiraciones. Este extraordinario corto resume la necesidad de búsqueda del origen del sentimiento más poderoso, la sutileza de la ternura de esa mirada a la naturaleza humana y, al final, la búsqueda de cada pequeño lugar que crea un significado sobre el espíritu del hombre contemporáneo.

Bestia, de Hugo Covarrubias

En la oscuridad de los regímenes políticos, acechan todo tipo de monstruos. La historia de la torturadora Ingrid Olderöck inquieta e incomoda, en su tránsito por las regiones más aterradoras de la mente humana. Con la dictadura militar chilena como telón de fondo, el corto es un recorrido a través de la mente de una mujer feroz, violenta y brutal. También, la concepción de su tortuosa humanidad. Uno de los documentos más dolorosos e inquietantes sobre las figuras que sostienen al totalitarismo de los últimos años. 

Affairs of the Art, de Joanna Quinn y Les Mills

Esta extraordinaria animación en 2D es un recorrido monumental a través de un tipo de visión sobre el arte, que sorprende por su vivacidad. Con Beryl, personaje frecuente en el trabajo de las directoras, el corto no solo muestra la emoción del arte al crearse como un vital trayecto hacia el tiempo íntimo. También, un viaje hacia el sentido del arte como elemento sanador de la psiquis colectiva e individual. 

Boxballet, de Anton Diakov

Con sus quince minutos de duración, la historia de amor entre la bailarina Olga y el boxeador Evguéni es una mirada ingenua sobre la ternura. Grotesca de a ratos, enternecedora como ejercicio visual de puro asombro y experimentación, el corto es una oda sobre lo romántico, llevado a una dimensión por completo nueva. También, una celebración a las pequeñas grandes cosas que hacen de la emoción el lugar más plácido y extraño de todos. 

Robin Robin, de Michael Please y Dan Ojari

Esta es la historia de una familia disfuncional como tantas otras. Con una pequeña diferencia: se trata de un pájaro criado por un clan de ratones. Con su estética exquisita pero en especial, su énfasis al tránsito emocional sobre la diferencia, el corto mira con cuidado los vínculos invisibles y el amor. Todo en el paquete de un refinado chiste de una audacia brillante, que deslumbra por su inteligencia. 

Enviar comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Notas Relacionadas

“Perfect Days” de Wim Wenders: Contemplando la fugaz belleza del presente

La nueva película del director alemán es un lento y delicado retrato sobre cómo nos relacionamos con el tiempo y los placeres que esconde lo mundano.

Festival de Cannes 2024: Las películas que integran la selección oficial

Esta mañana se anunció la programación del 77º Festival de Cannes, el más importante del año, con grandes leyendas y jóvenes promesas entre sus filas.

X-Men ’97 – Episodio 5: Un giro impactante que eleva la narrativa a un nuevo nivel

Con mucha violencia, pero también romance y utopías, el revival de la serie clásica de los años noventa demuestra que es muchísimo más que nostalgia.

BAFICI 25: Un cuarto de siglo celebrando el cine independiente en la ciudad

Llega la edición aniversario del Festival de Cine Independiente de Buenos Aires, en un contexto político que pone en jaque la producción cultural.