Deadpool y Wolverine fue un homenaje, despedida y sátira al universo de películas de Marvel de la 20th Century Fox, que es nada más y nada menos que el origen del fenómeno del cine de superhéroes y el boom de las adaptaciones que sigue vigente hasta hoy. Y tuvo como efecto secundario despertar en su audiencia una inevitable necesidad de revisitar esa serie de películas que desde hace veinticuatro años han formado parte de la vida de más de una generación.  

Pero mientras la saga de Spider-Man está más fuerte en nuestra memoria, ya que Spider-Man: No Way Home (2021) nos permitió esquematizar sus líneas temporales principales, seguir la cronología de la franquicia de X-Men es un asunto un poco más complicado. Esto se debe a que su producción fue mucho más caótica, a pesar de que algunas de sus películas están entre los mejores exponentes del cine de superhéroes. 

Los intentos de la Fox de explotar la franquicia a más no poder, los cambios de director y la crisis que trajo la aparición del Universo Cinematográfico de Marvel, que instaló en la industria la necesidad de conectar todas las franquicias y sub-franquicias en un mismo universo común, dieron como resultado una línea temporal bastante confusa y contradictoria.

Pero no hay que entrar en pánico, porque en esta nota vamos a tratar de darle fin al caos y repasar el orden cronológico de los acontecimientos de las películas, para poder abordarlas sin perder la cabeza. La idea es verlas en el orden que quieras, porque la cultura pop no es una ciencia exacta, y cualquiera puede apropiarse de esas producciones culturales del modo que más le agrade.

Sí, esta nota va a tener spoilers, así que avancen con precaución.

Sagas y sub-sagas 

La franquicia cinematográfica de X-Men está dividida en tres sagas bien diferenciadas:

Primero está la trilogía original, con las primeras dos películas de Bryan Singer: X-Men (2000), X2 (2003) y una tercera, dirigida por Brett Ratner, X-Men: The Last Stand (2006).

Luego le siguen dos precuelas: X-Men Origins: Wolverine (2009), de Gavin Hood, y X-Men First Class (2011), de Matthew Vaughn. The Wolverine (2013) y Logan (2017), de James Mangold, completan la trilogía de Wolverine.

Por otro lado, la película Days of the Future Past (2014) abre una segunda etapa de Bryan Singer en la franquicia, que seguirá con X-Men: Apocalyse (2016) y nuevamente terminará en manos de otro director con Dark Phoenix (2019), dirigida por Simon Kinberg.

Las primeras dos películas del mercenario bocazas, Deadpool (2016), de Tim Miller y Deadpool 2 (2018), de David Leitch, pueden considerarse como derivadas de la misma franquicia. Por otro lado, la película New Mutants (2020), de Josh Boone, se plantea como un spin-off totalmente independiente al resto de producciones.

La mitad de estas películas salieron antes de que la idea de “Universo Cinematográfico” estuviera establecida, y la otra mitad intentó construir uno sobre los cimientos de los lanzamientos anteriores. Por lo tanto, no existe una cohesión tan lograda como pasa en el MCU. Sin embargo, vamos a hacer un intento por reconstruir la cronología, ya que hay muchos puentes que se pueden establecer.  

El pasado de la Patrulla X (previo al 2000) 

Si hay que seguir el orden cronológico, tiene sentido empezar con las precuelas. Pero hay que tomar en cuenta que, a pesar de haber sido lanzadas después de las primeras tres películas, hay muchos cambios y contradicciones. Empecemos con Wolverine, que, al ser inmortal, es el mutante más antiguo del equipo principal.

En X-Men Origins: Wolverine (2009), vemos que su origen se remonta a 1845, en los territorios del noroeste norteamericano, que en ese momento estaba dominado por los británicos. Al ver a quien creía que era su padre ser asesinado por el jardinero Thomas Logan, el shock emocional que se produce en el pequeño James Howlett le despierta una mutación, liberando unas garras de hueso que le permiten atacar y asesinar al hombre.

El viejo Logan, antes de morir, le confiesa a James que él es su verdadero padre. James y su medio hermano, Victor, quien tiene una mutación similar a la suya y luego sería conocido como Sabertooth, parten para ser soldados. Juntos participan en la guerra civil, y las dos guerras mundiales. En la segunda es cuando Logan salva la vida de Yashida, un empresario japonés, tal como se cuenta en The Wolverine (2013).

En X-Men: First Class (2011) nos enteramos que, mientras esos dos peleaban en la segunda guerra mundial, un joven Erik Lehnsherr, que luego sería Magneto, había sido separado de sus padres en los campos de concentración de Auschwitz, y termina manifestando sus poderes magnéticos (una escena que también se cuenta en la primera X-Men).

Por otra parte, en su mansión familiar en Nueva York, Charles Xavier -entonces un niño telépata- conoce a la mutante cambiaformas Raven (quien luego sería Mistique) y la invita a vivir con él. La década del sesenta encuentra a Xavier (James McAvoy) con un doctorado de la universidad de Oxford, y a Erik (Michael Fassbender) intentando encontrar a Klaus Schmidt, un oficial nazi que había asesinado a su madre.

Schmidt se ha transformado en el supervillano Sebastian Shaw (Kevin Bacon), un mutante cuyos poderes le permiten absorber la energía de otros mutantes para mantenerse joven. Su plan es causar una tercera guerra mundial, para debilitar a los humanos y darle poder a su raza, que considera superior. Para ello cuenta con la ayuda del Hellfire Club, un grupo de villanos conformado también por Emma Frost (January Jones), Riptide (Alex González) y Azazel (Jason Flemyng).

La oficial de la CIA Moira MacTaggert (Rose Byrne) lleva a Xavier y a Raven a la División X, una oficina secreta que protege a los mutantes. Ahí conocen a Bestia (Nicholas Hoult) y a Erik, que se les unirá para detener a Shaw. Con Cerebro, la supercomputadora de Hank McCoy/Bestia, el grupo recluta a otros mutantes entre los que se encuentra Wolverine (pero él no acepta). Finalmente logran vencer a Shaw, y evitar un conflicto internacional entre Estados Unidos y la Unión Soviética ocasionado por la crisis de los misiles.

Sin embargo, aunque trabajaron juntos, al final de la película Erik admite que comparte muchas de las visiones de Shaw acerca de los mutantes. Así, parte con varios de los miembros del Hellfire Club para dar lugar a lo que será la hermandad de mutantes, estableciendo así definitivamente los dos bandos clásicos de la saga.  

Después de la crisis de los misiles, en 1962, Xavier transforma su mansión en una escuela que es a su vez un refugio para mutantes, la que unos años más tarde será la Escuela de Jóvenes Superdotados. El instituto funciona sin problemas hasta que llega la fase más avanzada de la guerra de Vietnam, ya entrada la década del setenta.

Como cuenta al principio Days of the Future Past (2014), muchos integrantes de la escuela fueron a la guerra, lo cual hizo que la institución cerrara por un tiempo. Es en esa época cuando Mistique (Jennifer Lawrence) asesina a Bolivar Trask (Peter Dinklage), un fabricante de armas. Este suceso va a ser más importante más adelante. También por esos años Magneto terminó preso por haber asesinado al presidente JFK.  

Pero volvamos ahora a James, el pequeño Wolverine, y su medio-hermano. Durante la guerra de Vietnam, el mal comportamiento de Victor hace que los sentencien a ser fusilados. Gracias a sus habilidades, ambos logran escapar.

Ya como fugitivos de la ley, conocen al oficial William Stryker, que les ofrece unirse al Equipo X, un grupo de mutantes que utilizan sus poderes para ejecutar misiones paramilitares. Ahí es cuando James (Hugh Jackman) comienza a usar Logan como su seudónimo. Como Victor (Liev Schreiber) seguía causando estragos con su comportamiento, Logan abandona el equipo y se va a Canadá a trabajar como maderero.

Un día regresa Stryker, se contacta con él y le cuenta que Victor se ha vuelto loco y está cazando miembros del equipo. Cuando descubre que su novia del momento está muerta, Logan se convence de que Victor es el enemigo. Stryker se aprovecha de esto y lo somete a un tratamiento que recubre todo su esqueleto con adamantium, el metal indestructible del universo Marvel.

Las verdaderas intenciones de Stryker (Danny Huston) eran borrarle la memoria a Logan y utilizarlo como su soldado personal. Cuando Logan se entera de esto, escapa, y se propone matar tanto a Stryker como a Victor. Más adelante se revela que Stryker está utilizando a su hermano y a otros mutantes para experimentar con ellos en un complejo llamado La Isla.

Con la ayuda de Gambito (Taylor Kitsch), un mutante que logró escapar de la influencia de Stryker, logran ubicarlo y vencerlo, no sin antes tener un enfrentamiento con Arma XI, la primera versión de Deadpool en aparecer en este universo. Muy lejos de la interpretación que conocemos hoy, pero también encarnado por Ryan Reynolds, este Deadpool es un asesino de mutantes que obtiene sus poderes de la combinación de diferentes mutaciones .  

Luego de la batalla, Stryker le dispara a Wolverine con balas de adamantium, lo cual borrará su memoria, dejándolo en el estado en el que está al comienzo de la primera X-Men. Varios de los mutantes cautivos son enviados a la mansión de Xavier, que parece que en ese momento ya había vuelto a funcionar.

Entre esos mutantes está un joven Cíclope y una Emma Frost adolescente. Pero…¿Emma Frost no era adulta en First Class? Sí, por eso antes de meterse en la cronología de la saga principal hay que recordar que son películas de otra época en la que la continuidad no era realmente importante.

Un ejemplo de esas inconsistencias se da cuando en X-Men: The Last Stand (2006) vimos cómo Xavier y Magneto reclutan a la pequeña telépata Jean Grey, aunque no se supone que trabajaran juntos en ese momento. Hay muchos errores más, y explicarlos todos llevaría escribir otra nota. Mejor ignorarlos y seguir adelante.  

Línea temporal de la trilogía original 

En X-Men (2000) vemos que al equipo de X-Men de las precuelas se agregan Storm (Halle Berry) y Ice-Man (Shawn Ashmore), entre otros. La trama gira en torno al acta de registro de mutantes, una propuesta impulsada por el Senador Kelly (Bruce Davison) en el Congreso para obligar a los mutantes a revelar sus poderes e identidades.

Como siempre, mientras Xavier (Patrick Stewart) quiere lidiar con esto de manera pacífica, Magneto (Ian McKellen) prefiere secuestrar a Kelly e inducirle artificialmente una mutación, que su cuerpo no resiste y lo termina matando.

La película explora bastante el trauma de Rogue (Anna Paquin) al descubrir sus poderes, que termina llevándola a encontrarse con Wolverine y juntos unirse al equipo. Al final se termina insinuando que Logan podría viajar a Canadá para descubrir su pasado, ya que, como ya sabemos, sufría una amnesia que le impedía recordarlo.

Ese viaje tiene lugar en X2 (2003). El villano acá es William Stryker (Brian Cox), quien quiere usar a Cerebro para ejecutar un genocidio mutante. En el medio de muchas peleas contra mutantes manipulados mentalmente, Magneto le cuenta a Wolverine todo lo que se narra en su película precuela.

Al final de esta duología de Bryan Synger, Jean Grey (Famke Janssen) se sacrifica para evitar la muerte de miles de mutantes. Sin embargo, la última secuencia nos da a entender que no murió, sino que liberó una energía que hace acordar al Fenix Oscuro.  

En X-men: The Last Stand (2006), una versión oscura y descontrolada de Jean, con inconmensurables poderes destructivos, es una de las antagonistas de la historia. Al final de la película muere defininitivamente en manos de Wolverine, que la sacrifica nuevamente para salvar al mundo.

Pero, por fuera de ese arco, la película gira en torno a la posibilidad de la creación de una cura para el gen mutante, elaborada por los laboratorios Worthington, utilizando el genoma de un infante mutante llamado Jimmy. La cura seduce a algunos miembros del equipo, como Rogue, pero es criticada fervientemente por Magneto y su hermandad, que quieren matar al niño.

La trilogía termina con el equipo de Xavier ampliando derechos para los mutantes, a partir de la intervención de Bestia como embajador de la ONU. En el clímax de la película, Magneto es inyectado con la cura, y sus poderes parecen eliminarse, pero en la escena final nos enteramos que todavía conserva algo de sus habilidades magnéticas.

The Wolverine (2013) está ambientada poco después de The Last Stand, y adapta el famoso arco argumental de Wolverine en Japón, extraido directamente de los comics de Frank Miller. La película tiene una historia prácticamente independiente, que cuenta cómo Logan termina viajando al país del sol naciente convocado por su amigo Yashida, ya moribundo.

En agradecimiento por haberle salvado la vid,a le ofrece la oportunidad de volverse mortal y vivir una vida normal. Logan rechaza la propuesta, pero pronto se ve envuelto en una trama compleja de yakuzas que involucra a Mariko, la nieta de Yashida, y la mutante Viper. 

Lo importante en términos de continuidad es la escena post-créditos de la película, en la que Xavier y Magneto se encuentran con Logan para advertirle sobre la creación de un arma que podría acabar con la raza mutante. Eso nos da un enlace directo con la trama de Days of the Future Past (2014).

Mientras se están preparando las bases de un futuro distópico es cuando tiene lugar la primera película de Deadpool (2016). Se trata de un relato de origen del personaje. Wade Wilson (Ryan Reynolds) es un mercenario que es sometido a un tratamiento experimental para luchar contra el cáncer. El método funciona, y además le otorga poderes de regeneración, pero con el costo de que lo deja desfigurado de por vida. En la primer película Deadpool busca venganza contra Ajax, el responsable de su nueva condición.

Deadpool 2 (2018), en cambio, es mucho más enroscada porque involucra viajes en el tiempo y mucha más ruptura de la cuarta pared. La trama empieza con Deadpool asesinando accidentalmente a su novia Vanessa (Morena Baccarin), lo cual le causa un tremendo trauma. Pero todo cambia cuando es reclutado por los X-Men, aunque en la película solo vemos a Coloso (Andre Tricoteux/Stefan Kapicic) y otros personajes secundarios, entre los que están Domino (Zazie Beetz) y Shatterstar (Lewis Tan).

Con ellos forma un subgrupo llamado X-Force, y se embarca en una misión para proteger a un joven mutante pirokinético llamado Russell Collins (Julian Dennison). Eso lo lleva a encontrarse con Cable (Josh Brolin), un viajero del futuro, del año 2068 (incluso posterior al año en el que transcurre la película Logan) que quiere asesinar a Russell para impedir que se transforme en un asesino serial que va a asesinar a toda su familia.

Finalmente, los héroes ganan y logran evitar un futuro funesto para Cable. En una escena post-créditos Wade Wilson utiliza la máquina del tiempo para salvar a su novia, pero como es Deadpool no hay ningún tipo de paradoja ni problema temporal. 

Aunque Cable se salió con la suya, el futuro oscuro que no se va a poder evitar es el del año 2023, que se cuenta en Days of the Future Past (2014), una de las mejores películas de toda la saga. En esa distopía, las armas autónomas conocidas como Centinelas están cazando y asesinando mutantes, exterminando a la población.

Para evitar esto, Wolverine viaja subjetivamente (dentro de su propio cuerpo) al año 1973, en la época en la que la mansión Xavier estaba suspendida durante la guerra de Vietnam. Su objetivo es prevenir el asesinato del fabricante de armas Bolivar Trask. Resulta que luego de ese suceso, el gobierno capturó a Mystique y utilizó su ADN para fabricar a los Centinelas.

El viaje de Wolverine da lugar a una nueva línea temporal que es un soft reboot de la saga, ahora de nuevo a cargo de Bryan Singer, dando uso al nuevo elenco de actores que se había introducido en First Class. En la película, Logan se une a Xavier, Magneto y el mutante Quicksilver (Evan Peters) para evitar que se construyan los Centinelas, y después de varios intentos lo logran. El futuro oscuro parece ser evitado, al menos lo suficiente para que Logan regrese a un nuevo presente que se siente más prometedor.

Con lo que no contaba la Patrulla X es que el mutante más antiguo de la historia, En Sabah Nur, también conocido como el supervillano Apocalipsis, sería revivido por sus seguidores con la intención de recrear el mundo a su propia voluntad.  

X-Men: Apocalypse (2016) transcurre en el 1983 de esta nueva línea temporal, diez años después de la historia anterior. Además de contar la lucha contra ese colosal villano (interpretado por un irreconocible Oscar Isaac) y sus cuatro jinetes, es una especie de nuevo First Class que introduce a la continuidad un equipo más parecido al de la trilogía original.

Acá se narra como Scott Summers (Tye Sheridan) conoce a Jean Gray (Sophie Turner), así como las primeras apariciones de Ororo Munroe (Tormenta, interpretada por Alexandra Shipp) y Kurt Wagner (Nightcrawler, interpretado por Kodi Smit-McPhee). Y se suma al equipo Quicksilver, que se da cuenta de que es el hijo de Magneto (aunque no le dice).

La historia termina con Jean Grey utilizando su máximo poder para eliminar al villano, y con Hank y Raven entrenando al nuevo equipo. Pero una subtrama nos muestra a Wolverine siendo capturado nuevamente por William Stryker, que experimenta con él buscando convertirlo en una máquina de matar llamada Arma X. Logan logra escapar, pero una escena post-créditos revela que su ADN ha sido utilizado para crear otro mutante con características similares. Ya veremos quién es.

En la sumamente olvidable secuela Dark Phoenix (2019) se cuenta la historia de la transformación de Jean Grey en el Fénix Oscuro en esta nueva línea temporal, donde el icónico evento pasa en los años noventa. Se podría decir que por primera vez se representa de un modo más cercano a la historia original de los cómics, aunque no por eso más efectivo.

En una misión para salvar unos astronautas, Jean se expone a un nivel de energía que hace que sus poderes se salgan de control. Después de enfrentarse contra una raza extraterrestre, matar a Mystique y generar una interna entre los mutantes, Jean se sacrifica (por primera y única vez en esta línea temporal) para salvar a su raza y al planeta entero. Finalmente, la escuela de jóvenes mutantes cambia su nombre por Jean Grey en su honor, manejada por Hank McCoy luego de que Xavier se haya retirado.  

Unos treinta años después del final de esa película, tiene lugar el presente de Days of the Future Past. En algún punto después de ese presente está posiblemente ambientada otra película nefasta, la postergadísima The New Mutants (2020). Esta narra la historia de cinco mutantes que están privados de su libertad en un extraño complejo, donde son sometidos a experimentos para poner a prueba sus poderes.

Los mutantes son la licántropa Wolfsbane (Maisie Williams), la sacerdotisa rusa Magik (Anya Taylor-Joy), Cannonball (Charlie Heaton), con el poder de impulsarse a sí mismo con fuerza en el aire, y Mirage (Blu Hunt), con el poder de crear ilusiones a partir de los miedos de la gente.

Su objetivo será escapar del lugar, en una película que pretende crear una atmósfera de terror. La cronología de esa película es tan difusa como todo lo demás que la rodea. Pero de todas maneras es probable que, por su atmósfera distópica, esté ambientada solo unos pocos años antes de Logan (2017), que transcurre en el 2029.

Algunas referencias hacen pensar que Logan podría estar ubicada después del futuro distópico que se previno en Days of The Future Past, y por lo tanto sería una secuela de The Wolverine, aunque el mismo director dijo que se ubica posteriormente a los sucesos de Dark Phoenix.

Además, acá se revela que la muestra de ADN de la escena post-créditos de Apocalypse fue utilizada para crear a la niña mutante Laura, confirmando que ambas películas están en la misma línea temporal. Lo cierto es que mucho no importa, porque Logan es un películón, probablemente la mejor de toda la franquicia, y un excelente cierre para todo el universo mutante de la Fox.

En esta historia, hace 25 años que ningún mutante ha nacido, y las habilidades de regeneración de Logan empiezan a fallar. Nuestro antihéroe trabaja como chofer de limusinas en Texas, y tiene que cuidar a un Charles Xavier de 97 años, que tiene demencia senil y, al ser un telépata, ha causado varios estragos.

De pronto se choca con una chica mutante llamada Laura (Dafne Keen), que tiene poderes similares a él. Ella está siendo perseguida por Transigen, una corporación que ha estado experimentando con mutantes para crear super-soldados.  

Logan termina accediendo a acompañarla en la búsqueda un refugio llamado Eden, donde piensan que ella puede estar a salvo. En el camino, tiene que lidiar con su estado de salud y sus conflictos emocionales. Laura será finalmente quien continúe el legado de Wolverine, enterrando a su compañero y dándole cierre, de un modo muy emocionante, a 24 años de Huck Jackman interpretando el personaje.

Y con ese legado terminamos este recorrido, plagado de reescrituras, omisiones, cambios de actores y contradicciones constantes. Pero valió la pena, porque es sobre este recorrido que Deadpool & Wolverine (2024) construye y destruye, sirviendo de obituario para un universo que nos dio, entre muchas películas olvidables, algunas joyas que han pasado a ser hitos de la historia del cine de superhéroes.