Luego de un año de espera interminable Wicked: For Good (Wicked: Por Siempre, como la conocimos por estas latitudes), llegó a los cines el 20 de noviembre con la promesa de una “Conclusión épica” para la historia de las jóvenes brujas de la tierra de Oz.
Y, por supuesto, además de tener que responder a la pregunta lógica del público sobre si esta segunda entrega estará a la altura de las expectativas, Wicked: Por Siempre carga con el desafío de narrar el segundo acto de Wicked, la multipremiada obra musical en la que está basada.
EL SEGUNDO ACTO
Como ya te explicamos muy temprano en el desarrollo de la producción, Jon M. Chu (el director de ambas entregas para la pantalla grande) tomó la decisión de contar esta historia en dos películas, respetando la estructura del musical, siendo el primer acto mucho más luminoso.
La narración se presenta ante la audiencia como un flashback: conocemos a los personajes en el contexto de la Universidad Shiz, adonde asisten y conviven estudiantes de todo Oz. Allí, Elphaba (Cynthia Erivo) y Glinda (Ariana Grande) superan sus diferencias y prejuicios para forjar una amistad inquebrantable, mientras, en paralelo, un régimen autoritario late en las penumbras, forzando a cada uno a plantearse de qué lado está.
Y culminando con la Bruja Verde (Elphaba) encontrando sus fuerzas, revelándose ante los planes del dictador (El Mago) en nombre de la justicia, mientras la Bruja Rosa (Glinda) opta por un camino más fácil y menos comprometido.
Elphaba vuela, se canta Defying Gravity, lloramos todos.
Cae el telón.
El segundo acto se planta con un salto temporal en donde los ciudadanos de Oz están aterrados por las acciones de la Bruja Malvada del Oeste, nombre otorgado a Elphaba por la Secretaria de Prensa de El Mago de Oz, a quien ya vimos revelado como el verdadero villano de la historia). Y aliviando ese terror con ayuda de una figura carismática y protectora: Glinda, la Buena (otra opereta de prensa, si, Wicked podría llamarse “El rol de los medios”).
La historia se vuelve más compleja y oscura, lo que antes eran amenazas se han transformado en persecución y peligro de muerte. El Mal deja de ser una idea para ser el enemigo a combatir. Todo esto en simultáneo a los hechos que ya conocimos en El Mago de Oz (1939).
Si bien tiene momentos de alto impacto y canciones memorables (incluida For Good, el conmovedor dúo del desenlace que todos terminamos tarareando mientras salimos del teatro deshidratados de tanto llanto) nada se compara a los momentos de anhelo de The Wizard and I, el fenómeno visual y coreográfico de Dancing Through Life o el grito desesperado al final de Defying Gravity (todos momentos icónicos del primer acto).
La resolución llega un poco a las apuradas, pero es muy satisfactoria porque la platea viene comprometida con estos personajes durante la hora y media anterior, cada decisión tomada en el primer acto, resuena en el segundo, hasta las líneas melódicas de ambos actos dialogan entre ellas.
El desafío será entonces replicar esto en una película estrenada a un año de la primera entrega sin defraudar a los fans del material original y sosteniendo la atención del espectador casual que se sentará en una sala de cine a conocer el final de esta historia.
Por siempre
Largo hemos hablado sobre la visión de Jon M. Chu y su propuesta casi inmersiva de darnos la bienvenida a la Tierra de Oz. Y si bien se encargó de dejar todo ajustado para zambullirnos otra vez en este universo, Wicked: Por Siempre (2025) tarda un poco en encontrar su ritmo (un pecado, siendo un musical).
En su esfuerzo por recapitular eventos de la película anterior, extiende demasiado la obertura y termina perdiendo impacto. Nuevos segmentos musicales son agregados y todo se siente demasiado largo, por momentos confuso. Sin embargo, más adelante en la película hay dos canciones inéditas (en pos de calificar para competir en los Oscar) que ayudan a avanzar la trama y que son utilizadas para profundizar en las historias de ambas protagonistas.
Dos cosas son muy claras: el lugar que tanto Elphaba como Glinda ocupan en esta nueva narrativa. Elphaba va contra la corriente, luchando por lo que cree justo. Y Glinda se deja llevar por el río, confiando en lo que cree que es lo correcto.
El mayor triunfo de la película radica en cómo ambos personajes van evolucionando al atravesar la tormenta (literal). Una vez que Wicked: Por Siempre logra arrancar, nos lleva de la manito hasta terminar profundamente conmovidos con un sorpresivo final.
LA PELÍCULA DE ARIANA
Erivo se luce desplegando el torbellino emocional y la frustración constante de una Elphaba que, a pesar de sus intentos por abrazar el don de la magia que trajo de nacimiento, no para de chocar de frente contra todo. Y que termina aceptando su mote de Bruja Malvada.
Ariana Grande es el eje de esta segunda parte. Ya habíamos descubierto que la cámara la ama, y sabíamos de sus habilidades como actriz de comedia: Glinda era divertida, carisma puro y nos hacía reír con sus “pajaritos en la cabeza”. Ahora Glinda La Buena es una mujer en lucha constante contra sus propios fantasmas, un personaje tridimensional, profundo, de grandes matices; y todo se refleja en la mirada de Grande. Un trabajo actoral que, seguro, terminará multi nominado y, muy merecidamente, premiado.
Jon M. Chu no despega la cámara del rostro de Ariana y la hace brillar, regodeándose por haber conseguido el elenco perfecto para contar una historia tan querida. (Exceptuando a su amiga personal, Michelle Yeoh, que lamentablemente es la joya más opaca en lo que parece ser una corona impecable).
Wicked:Por Siempre no es perfecta, pero trae consigo momentos épicos deslumbrantes, interpretaciones poderosas, revelaciones impactantes, música inolvidable y, al igual que su predecesora: corazón. Una fiesta audiovisual imperdible.
💡 POPCON TIPS:
Ya está disponible en HBO Max el Especial para televisión Wicked, One Wonderful Night, emitido por NBC el pasado 7 de noviembre. El elenco de Wicked: Por Siempre se reúne en un espectáculo sin precedentes cantando en vivo las canciones de Wicked en un despliegue de talento, danza y música.
No importa si sos Team Elphie o Team Glinda, no te lo vas a querer perder.
De acuerdo de todo con Ian. Que bueno que tenga lugar en PopCon un referente y autoridad en materia de musicales!