Intempestiva, ávida de conocimiento, inconformista, apasionada. De esta manera podríamos describir, a grandes rasgos, a uno de los mejores personajes de la literatura: Jo March, creada por Louisa May Alcott para su emblemática novela, Little Women (1868). Asimismo, esas cualidades aplican a una joven que hizo su debut en la actuación precisamente poniéndose en la piel de Josephine: Maya Hawke. En 2017, la hija de Ethan Hawke y Uma Thurman hizo su debut en la miniserie de la BBC creada por Heidi Thomas y su poderoso trabajo ponía al descubierto cuánto tenía en común Maya con esa mujer que ponía su pasión en el arte y que lo hacía de un modo tal que se volvía contagioso. Jo es un huracán y Maya estaba en camino a serlo, con un mantra en mente: ser auténtica.
“Cuando era más chica, quería los papeles que todo el mundo quería, quería hacer canciones que a todo el mundo le gustasen. Ahora, siento que cuando estoy haciendo algo para conformar a los demás, eso se nota y es poco genuino, uno está mintiendo. La mejor manera de comunicarse con el mundo a través de tu esencia, y te pueden amar u odiar, pero al menos tenés la tranquilidad de que hiciste las cosas a tu manera”, expresó la actriz y cantante quien, luego de Little Women, se abocó a trazar ese camino de autenticidad.
El primer paso fue, paradójicamente, el más grande. En 2019 llegó el personaje de Robin Buckley en Stranger Things (2016- ), que rápidamente se convirtió en ícono queer y en una presencia magnética, sobre todo cuando Hawke demostraba su talento para los intercambios veloces entre Robin y Steve (Joe Keery), una amistad sincera, tierna, incondicional. La explosión que significó la serie de los hermanos Duffer en su vida terminó siendo tópico de conversación en las cenas familiares. Así lo contó el propio Ethan Hawke en un vivo de Instagram que hizo con su hija.
En plena promoción de su minsierie, The Last Movie Stars (2022), el actor y director le pidió a Maya que sea ella quien difunda en redes la charla que iban a entablar sobre su producción para HBO sobre Paul Newman y Joanne Woodward. “Vos sos la más famosa ahora”, le manifestó su padre con un tono jocoso que estaba escondiendo un enorme orgullo. “Lo que a vos te está sucediendo ahora lo vivimos con tu mamá cuando eras muy chica, los flashes, la atención, que tu vida no sea la misma”, le dijo su papá en ese encantador diálogo.
Maya, muy lejos de asumir ese rol, se mostró más interesada por el trabajo de su progenitor que por lo que ella misma estaba haciendo. De hecho, la actriz trabajó con él en The Good Lord Bird (2020), la ficción de Paramount+ creada y protagonizada por Hawke en la que pudo explorar otra faceta en ese drama histórico sobre la figura del abolicionista John Brown. Lejos de renegar de sus padres, Maya disfruta colaborar con ellos, aprender de ellos. Entre sus próxiomos proyectos se encuentra el thriller The Kill Room, en el que actuará junto a Uma.
Trabajar en familia
Uno de los aspectos más atractivos de la actriz es la autoconsciencia sobre el lugar que ocupa en la industria. “Algunos trabajos no los obtuve normalmente, para algunos no tuve que audicionar”, compartió, en relación a las producciones en las que trabajó con sus padres de las cuales no reniega en absoluto, si bien reconoce el privilegio. “En un momento se dio todo tan natural, empezamos a hablar de lo divertido que sería hacer cosas juntos porque nos cuesta estar en un mismo lugar, entonces quisimos crear ámbitos familiares donde pudiéramos trabajar y disfrutarlo”. De todas maneras, antes de estar frente a una cámara, Hawke estuvo detrás, observando a sus padres.
Sin embargo, Maya está forjando su propia carrera -ya trabajó con Quentin Tarantino en Once Upon a Time in Hollywood y con Gia Coppola en Mainstream– y no pretende hacerlo emulando a nadie, como ella mismo lo aclaró. “Cuanto más crecés, más joven te volvés. Cuando sos joven querés ser más grande, tenés miedos, inseguridades. Pero ahora que me siento más adulta puedo ser más lúdica, tener más confianza en lo que hago, ganar más entusiasmo, ese miedo ya se fue”, expresó Maya, cuyo espíritu arrojadizo la llevó a comandar una ambiciosa remake teen de un clásico de Alfred Hitchcock, Strangers on a Train (1951) .
Se trata de la comedia negra de Netflix, Do Revenge (2022), que se estrenó este viernes y en la que forma una eficaz dupla con Camila Mendes, tan solo la punta del ovillo de lo que se viene para Hawke, desde Maestro de Bradley Cooper a Asteroid City de Wes Anderson. “Wes es un director que permite que habites tu personaje y así es cómo me gusta trabajar, brindando humanidad al papel que tengo en mis manos”, manifestó Maya, quien hizo lo propio con la música, su otra gran pasión.
En 2020 editó Blush, su primer álbum de estudio, inspirado en las composiciones “de músicos que también son grandes poetas” como Joni Mitchell, Bod Dylan y Patti Smith, y el próximo viernes 23 dará a conocer su segundo disco, Moss, producido por ella misma junto a Benjamin Lazar Davis y Jonathan Low, quien trabajó en las mezclas de Folklore (2020) de Taylor Swift, “la principal influencia de estas canciones”, reveló Hawke. “Este álbum está escrito por la Maya que iba a la secundaria, son canciones que me hubiese gustado componer a los 15″, expresó y trazó un paralelismo con su carrera como actriz.
“Cuando interpretás un personaje podés pretender que tenés 16, 20, ser más joven de lo que realmente sos, y quise trasladar eso a mi música”, explicó una artista que no tiene techo porque se embebe constantemente de expresiones culturales. Eso se lo agradece a sus padres, pero ahora llegó el momento de brillar con luz propia.
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