Luego de tres años, Olivia Wilde vuelve a presentar un largometraje. Se trata de Don’t Worry Darling (2022), un thriller protagonizado por Florence Pugh y Harry Styles. Una película que promete demostrar una nueva faceta de Wilde como directora, después de su ópera prima, Booksmart (2019), una mezcla entre los géneros de comedia y coming-of-age.
En esta ocasión, la directora se vuelve a alinear con un guion escrito por Katie Silberman, un dúo que se vio en su primera película. Junto a Silberman, los guionistas Carey y Shane Van Dyke también son los responsables de esta historia. El proyecto se anunció durante la pandemia y, casi dos años después, se revelaron las primeras imágenes oficiales en el tráiler y su fecha de estreno, en el marco de la CinemaCon.
La nueva película de Olivia Wilde viene a proponer un thriller psicológico que transcurre en los años cincuenta. Narra la historia de Alice (Pugh), una joven ama de casa que vive con su esposo, Jack (Styles), en una comunidad utópica que podría estar escondiendo secretos perturbadores. El giro surge cuando Alice empieza a sospechar de la empresa donde trabaja Jack. A medida que crece su curiosidad y su desconfianza, también crecen las creencias de todos los que la rodean sobre su inestabilidad mental.
El elenco lo completan Chris Pine, Gemma Chan, Nick Kroll, Douglas Smith, Timothy Simmons y la misma directora, entre otros. La mayoría de estos, interpretando papeles de una típica sociedad de los suburbios en los años ’50. Casas ideales, autos de lujo y colores vivos son los principales elementos visuales que muestra el tráiler. Mezclando el suspenso, el misterio y la psicología, Olivia Wilde expondrá un largometraje lleno de secretos, donde el punto de vista de la protagonista es fundamental para el desarrollo de la historia.
Será una película muy diferente a la ópera prima de la directora, y con grandes influencias del terror de los últimos años, como los títulos de Robert Eggers, Ari Aster y Jordan Peele. Además, la misma Wilde contó que una de sus mayores inspiraciones en la creación de Don’t Worry Darling fueron las películas psicosexuales de Adrian Lyne. Específicamente, mencionó Fatal Attraction (1987) e Indecent Proposal (1993).
En cuanto a los protagonistas, el rostro de Harry Styles se pudo ver en cine en Dunkirk (2017) y, más recientemente, en Eternals (2021). Sin embargo, se podría decir que su rol en esta película configura su primer protagónico. Por su parte, Florence Pugh brilló en Midsommar (2019) y en su papel de Yelena Benova en Black Widow (2021), entre otros. Este dúo encarna a los personajes principales de este thriller, interpretando a una pareja perfecta en una sociedad que no parece ser lo que es.
El estreno oficial de Don’t Worry Darling será el próximo 23 de septiembre. Una película que promete inquietar hasta al más valiente, de la mano de una directora que poco a poco genera una filmografía a la que está bueno prestarle atención. En palabras de la propia cineasta, estamos al frente de una película que se pregunta ¿Qué estamos dispuestos a sacrificar para hacer lo correcto?
