Amigas son las amigas

Big Mood: una oscura comedia sobre la amistad y las batallas de la salud mental

Tras el enorme reconocimiento que le dio el éxito mundial de Bridgerton, Nicola Coughlan presentó su trabajo más ambicioso y multifacético a la fecha.

por | Ago 2, 2024

Después de interpretar a Claire en Derry Girls (2018- 2022), en donde se puso en la piel de una adolescente queer ansiosa cuyos exabruptos y ataques de pánico se desataban ante el más mínimo inconveniente, Nicola Coughlan se ha consagrado como una profesional de la comedia. Como Penelope en Bridgerton (2020-) conocimos su lado más dulce, desesperadamente enamorada y sensual. Pero ahora con Big Mood (2024-), no solo se consagra como actriz dramática, sino que nos ofrece una actuación muy humana, en donde la forma en que explora una temática tan compleja como es la de los trastornos mentales promete llenarla de premios y consagrarla como una de las actrices más destacadas y multifacéticas de su generación. 

Producida por la cadena británica E4, hogar de series como Skins (2007-2013), Misfits (2009-2013) y My Mad Fat Diary (2013-2015), Big Mood se centra en la historia de dos amigas. Por un lado tenemos a Eddie (Lydia West), dueña de un bar, mientras que Maggie (Coughlan) es guionista. Son amigas desde la infancia, casi hermanas en el corazón y están siempre la una para la otra. Sin embargo, rápidamente nos enteramos que no todo es color de rosas en la vida de Maggie, ya que tiene diagnosticado un grado alto de bipolaridad. 

La cantidad de producciones que exploran la temática de las enfermedades mentales crece junto con la necesidad que tenemos por encontrarnos representados más ampliamente en pantalla. Recordemos el extraordinario tercer episodio de la primera temporada de Modern Love (2019-2021), aquel protagonizado por Anne Hathaway y en donde vimos una excelente búsqueda por explorar el tema en una serie de llegada masiva. 

Pese a que el humor de Big Mood es capaz de sacarnos carcajadas sin parar, la serie maneja tonos muy distintos, de manera fluida y coherentemente, además de con mucho respeto. Estos cambios en la psiquis de la protagonista se acompañan tanto con el color como el sonido, ayudándonos a hacer un click que nos permite reconocer cuando el personaje está cayendo en un pico depresivo o en uno maniaco. 

Sumándole a la destacable actuación de Nicola y del elenco, también se aprecia muchísimo que la historia se desarrolle con tanta seriedad y didáctica, permitiendo al público interiorizarse, aprender y hasta verse reflejado en las vivencias de los personajes. Maggie tiene momentos arriba, en donde está de acá para allá y hace mil cosas sin parar, queriendo ver amigos, familia, cambiar de trabajo, de ropa o hasta dejar la medicación porque considera que se siente bien.

Pero en otros momentos la música ya no la acompaña y la vemos en una paleta de colores muy fría, en la cama rodeada de cajas de comida, sin bañarse, sin querer lavarse los dientes o peinarse. Sin ninguna voluntad de levantarse de la cama. No responde al teléfono porque no quiere hablar con nadie, ignorando así el trabajo y las responsabilidades. 

Estas escenas también tocan un poco el tabú que hay al hablar sobre este tipo de fármacos. ¿Toma pastillas? Para muchos debe estar loca. Además de plantear estos prejuicios, la serie se mantiene firme en su realismo incluso al hablar de la medicación específica que toma su protagonista y sus efectos. Esto no solo enriquece a la historia sino que, en palabras de su creadora y escritora, Camila Whitehill, espera que invite a los que estén del otro lado a no tener miedo a la hora de buscar ayuda. 

Ese final tan abierto nos dejó con ansias por una segunda temporada. Si bien Eddie siempre acompañó a Maggie en todo e interpreta de manera hermosa lo que significa ser amiga o familia de alguien enfermo, las cosas cambian. Durante un episodio maníaco-depresivo Maggie le falla a Eddie en el momento en que más la necesita, lo que lleva a que las dos amigas tengan una pelea de la que parece no hay vuelta atrás. ¿Volverá todo a la normalidad? No tenemos aún fecha para el regreso de Big Mood, pero sin duda será una serie que recordaremos por tratar con tanto amor y a través de una gran arista un tópico que de alguna forma nos atraviesa a todos.

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Notas Relacionadas

Sex Education: Todo lo que sabemos sobre la cuarta y última temporada de la serie
Sex Education: Todo lo que sabemos sobre la cuarta y última temporada de la serie

Si vos tampoco te acordás exactamente en qué quedó todo, quién sale con quién y qué podemos esperar de esta nueva entrega, acá te contamos todo.

Daisy Jones & The Six – Final de temporada: el mundo cabe en una canción

Terminó la serie basada en la novela de Taylor Jenkins Reid e inspirada en la historia de Fleetwood Mac y acá analizamos sus altibajos (con spoilers).

A League of Their Own: béisbol, historias queer y la amistad ante todo
A League of Their Own: béisbol, historias queer y la amistad ante todo

La serie basada en la película de Penny Marshall es una propuesta aggiornada y fresca; en esta nota te contamos por qué no hay que dejarla pasar.

Big Mouth Temporada 5 Explorando la delgada línea entre el amor y el odio
Big Mouth – Temporada 5: Explorando la delgada línea entre el amor y el odio

En su esperado regreso, la serie animada más irreverente de Netflix se enfoca en la intimidad de sus personajes y prepara el terreno para el spin-off.

Euge Capisce

Si no estoy trabajando en un show de música, me encontrás con un té en la mano maratoneando una serie o leyendo un libro.