Una rebelde Jedi

Ahsoka: Un comienzo en busca de su propia identidad y con pocas ambiciones

La nueva serie live action de Disney+ continĂșa el legado de la animada Star Wars: Rebels con dos primeros episodios introductorios de ritmo lento.

por | Ago 22, 2023

Ahsoka: Un comienzo en busca de su propia identidad y con pocas ambiciones

Ahsoka Tano (Rosario Dawson), no sigue las reglas estĂĄndar de la cultura Jedi. El personaje menciona lo anterior en varias ocasiones, en los dos primeros capĂ­tulos de la serie que lleva su nombre. Lo cual es extraordinario, en la medida que recuerda que Ahsoka (Padawan, Jedi, rebelde, expatriada) es un personaje a la periferia. De hecho, la serie comienza por dejar en claro que la caĂ­da del Imperio y el surgimiento de la RepĂșblica, solo acentuĂł las sombras y las luces de una galaxia golpeada y sacudida por la reciente violencia sufrida. 

Mås cercana a Andor (2022-) que a Obi-Wan Kenobi (2022-), la serie de Dave Filoni (Rebels, The Clone Wars) es un homenaje sincero al mundo de Star Wars, desde una madurez narrativa evidente. El tono total de la producción es la de un leve pesimismo. A pesar de que no se deslinda del todo de los elementos de la Space Opera, Ahsoka se basa en largas conversaciones y la capacidad de sus personajes para expresar la dura carga de experiencias que llevan a cuestas. Lo que incluye las heridas sin sanar, un pasado tumultuoso y la reintegración a una cierta normalidad maltrecha. 

Solo que Ahsoka, todavĂ­a tiene una misiĂłn. Los dos primeros capĂ­tulos se enfocan, tal y como se trata, de una continuaciĂłn espiritual poco disimulada de Star Wars: Rebels (2014-2018), en la bĂșsqueda de Ezra Bridger (Eman Esfandi). Para el comienzo de la producciĂłn, su desapariciĂłn sigue siendo un misterio. Uno que, ademĂĄs, atormenta a Sabine Wren (Natasha Liu Bordizzo) y por el que Ahsoka recorre el universo en busca de respuestas. El guion de Dave Filoni pone especial interĂ©s en que dejar claro que hay un motivo emocional y moral en el propĂłsito de sus personajes.

Varios escenarios que se ajustan

Pero justo por eso, a la historia le lleva esfuerzos comenzar a contar su conflicto. De hecho, el primer episodio se limita a diĂĄlogos de contexto y la presentaciĂłn de los escenarios. El amor de Filoni por la franquicia es evidente y cada escena (desde la batalla inicial protagonizada por dos “Sith” hasta el recorrido de la protagonista a travĂ©s del cosmos en busca de pistas), demuestran su conocimiento profundo de su mitologĂ­a.

Ahora bien, la gran pregunta que es imposible no formularse es si Ahsoka puede sostenerse sola sin depender del resto de las historias de la franquicia. La sombra gigantesca de Rebels estĂĄ ahĂ­, pero no es la Ășnica. Para comprender a cabalidad este relato de criaturas que apenas se recuperan de una guerra, habrĂ­a que remontarse tanto al canon literario como al televisivo. Lo que pone al argumento en una situaciĂłn complicada.

La producciĂłn tiene el grave — e insalvable, por momentos — problema de no encajar bien en ninguna parte del gran mapa de eventos de la saga. Mucho mĂĄs, cuando se encuentra en el terreno movedizo de ser un live-action de un querido tĂ­tulo que marcĂł Ă©poca. 

Pero mĂĄs allĂĄ de eso, el verdadero problema de Ahsoka es ser en exceso emocional en algunas ocasiones y otras, tan lineal como para resultar tediosa. A pesar de su interesante relato sobre un perĂ­odo casi novedoso en Star Wars, la sensaciĂłn general de la serie es que no pertenece a ningĂșn lado, que son fragmentos de una gran cantidad de informaciĂłn a la vez y que, en ninguna forma, esa combinaciĂłn logra sostener una Ășnica narraciĂłn. 

Incluso, la serie tiene problemas para ser algo mĂĄs que un conjunto de premisas, por ahora, poco claras ÂżSe trata de la bĂșsqueda de Ezra? ÂżDe la presentaciĂłn del Gran Almirante Thrawn (Lars Mikkelsen)? ÂżDe vincular a la serie con el resto de las nuevas tramas de Star Wars? Es notorio que Ahsoka pertenece al llamado Mandoverse, en la medida que comparten una lĂ­nea conjunta de acontecimientos que se entrecruzan unos a otros. 

Ahora bien, el gran inconveniente sigue siendo uno: Ahsoka tiene una cualidad fragmentaria, solemne y movediza que da la sensaciĂłn de no llevar a ninguna parte. Que, en realidad, es solo el preĂĄmbulo de algo mĂĄs grande, que se insinĂșa a la distancia. Por lo que es imposible definir — ahora mismo — su identidad, sentido o direcciĂłn.

De nuevo, a recorrer la galaxia muy, muy lejana 

Con dos capĂ­tulos estrenados y seis mĂĄs para resolver su conflicto, todavĂ­a es muy pronto para predecir quĂ© ocurrirĂĄ con Ahsoka o cuĂĄl serĂĄ su conclusiĂłn, en una bĂșsqueda que parece esencial, pero no del todo capital. En medio de personajes que toman decisiones sobre su futuro y que buscan cĂłmo enfocar su porvenir en lĂ­neas mĂĄs o menos comprensibles, la serie divaga mĂĄs de lo que relata. 

¿Se guarda Filoni lo mejor de la trama en medio de los conmovedores guiños a un universo amplio y mejor construído? La gran cuestión podría ser, en cualquier caso, cuånto tiempo puede depender Ahsoka de relatos previos sin comenzar el propio. La gran disyuntiva que deja abierta su estreno con dos episodios en Disney+.

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