Richard Gadd tomó las peores experiencias de su vida y las convirtió en un documento de dolorosa y cruda belleza, que explora las formas del trauma.

Richard Gadd tomó las peores experiencias de su vida y las convirtió en un documento de dolorosa y cruda belleza, que explora las formas del trauma.
La nueva película del director de “Call Me By Your Name” explora los misterios del deseo desde el campo deportivo, equiparando el amor con el triunfo.
En el escenario de la Japón feudal, la política, la guerra y un amor prohibido confluyen en una poderosa mirada acerca del encuentro de dos mundos.
Casas embrujadas, claustrofobia y terror gótico se combinan en un universo bien construido con más de un eco a la película francesa Livide, de 2011.
El siniestro personaje de Patricia Highsmith supera sus adaptaciones anteriores con elegancia y solidez, desde el misterio y la violencia sugerida.
El duelo entre el gorila gigante hollywoodense y el lagarto icónico de Japón alcanza sus extremos más exagerados con un entretenimiento del más puro.
Andrew Haigh tomó una novela del escritor japonés Taichi Yamada y la versionó como una historia de amor entre dos hombres devastados por la soledad.
Una sátira inteligente acerca de la hipocresía cultural y las expectativas intelectuales de un escritor afroamericano que batalla por la aceptación.